Guimba, un tirano, una época (1995)

Guimba, un tirano, una época (1995) presenta, con una precisa combinación de humor y crueldad, la vida y los caprichos de un típico dictador tercermundista sin límites, Congreso o Poder Judicial que lo detenga. Dos enormes "moles" autóctonas se enfrentan diariamente ante la mirada del soberano Guimba, quien se encarga de castigar al perdedor en la contienda; el pueblo trae periódicamente ofrendas para el soberano, que se queda con gran parte de lo producido en la pobre comarca; su hijo, un defectuoso enano, comparte con su padre su gusto desenfrenado por las mujeres, en especial las de otros, que son invitadas de modo poco amable a "visitar" el palacio cuando el deseo del tirano se enciende. Cheik Sissoko, el consagrado cineasta autor de "Guimba", crea al personaje central inspirándose en el sanguinario y muy real coronel Moussa Traoré, quien, encabezando el "Comité Militar de Liberación Nacional", derrocó en 1968 al presidente Modibo Keita e inauguró una feroz dictadura que solo culminó con otra revolución, veintitrés años después. Al igual que Traoré, "Guimba" recurre a poderes "sobrenaturales" y espíritus cuando las cosas no van bien. Las complicaciones comienzan cuando dos mujeres, descontentas con su arbitrariedad, deciden liderar una rebelión en su contra, similar a la que en abril de 1991 encabezó el coronel Touré, poniendo fin a la desastrosa gestión de Traoré en materia económica y política.