Sicario: El día del soldado

En la frontera entre Estados Unidos y México, un agente de la CIA recluta a un sicario para desatar una guerra entre los cárteles de la droga.

"Sicario: El día del soldado" es una película de acción y suspenso que se desarrolla en la frontera entre Estados Unidos y México. La trama se sitúa en un contexto de guerra contra el narcotráfico y sigue los eventos posteriores a la primera entrega de la saga, "Sicario" (2015).

La historia comienza cuando un grupo de terroristas islámicos cruza la frontera hacia Estados Unidos con la ayuda de los cárteles de la droga mexicanos. Ante esta amenaza, el gobierno estadounidense decide tomar medidas drásticas y autoriza al agente de la CIA, Matt Graver, interpretado por Josh Brolin, a formar un equipo de élite para combatir a los cárteles y desmantelar su red de tráfico de personas.

Graver recluta al misterioso y letal sicario Alejandro Gillick, interpretado por Benicio del Toro, para llevar a cabo una misión encubierta. Su objetivo es secuestrar a la hija de un importante narcotraficante y hacerle creer que fue obra de un grupo rival, desatando así una guerra entre los cárteles.

A medida que la misión avanza, Graver y Gillick se enfrentan a una serie de desafíos y traiciones que ponen en peligro su vida y su lealtad. La película explora temas como la corrupción, la violencia y la moralidad en el contexto de la lucha contra el narcotráfico en la frontera entre Estados Unidos y México.

Con una atmósfera tensa y una narrativa intensa, "Sicario: El día del soldado" presenta un escenario oscuro y peligroso donde los límites entre el bien y el mal se difuminan y los personajes se ven obligados a tomar decisiones difíciles para cumplir con su misión.